José Ángel Castillo Manzano
Psicólogo especialista en el ámbito de los trastornos fóbico-obsesivos y de ansiedad-estrés y experto en trastornos de personalidad, trauma complejo y disociación. Máster y Clínico EMDR

Su compromiso diario es ayudar a sus clientes a descubrir sus talentos y potencialidades en el convencimiento de que cuando una persona logra cambios, se desata un proceso único en su interior, de confianza y autoestima, que facilita cada vez más la consecución de nuevos retos. Cree que ese es realmente el cambio, cuando nos sentímos absolutamente orgullosos de quienes somos y de lo que somos capaces de conseguir siendo nosotros.
José Ángel trabaja haciendo terapia en ALTEA-PSICOLOGOS desde 1990, año de su fundación. Su dilatada experiencia como psicoterapeuta y facilitador de grupos, unido a su afán por conocer y aprender nuevas herramientas terapéuticas, lo acreditan como un valorado especialista en alteraciones de personalidad, y en el ámbito de los trastornos fóbico-obsesivos y de ansiedad-estrés.
Acabó psicología en el 1986 en la Universidad de Granada. Partiendo de la orientación Cognitivo-Conductual, que recibe en la universidad, ha adquirido además formación en Terapia Familiar y Sistémica con la Escuela de San Pau en Barcelona, Master Practitioner en PNL (Programación Neuro-Lingüística), Diplomado en Terapia y Consultoría Sistémica y Coaching con DBM® (Developmental Behavioural Modelling), formado en Terapia Breve y Estratégica y terapia cognitiva basada en Mindfulness; competente para el Desarrollo de Habilidades de Inteligencia Emocional y Practitioner y Master Clinico en EMDR (Desensibilización y reprocesamiento por movimientos oculares) . Integra con soltura en su quehacer terapéutico las terapias de cuarta generación, el método de las Constelaciones Familiares de Bert Hellinguer, los patrones Ericksonianos, o el Eneagrama de la personalidad de Claudio Naranjo.
En ALTEA-PSICÓLOGOS es responsable del Área de Psicología Clínica Adultos, Terapia de Pareja y Mediación y Asesoramiento a Familias. Las funciones que realiza se orientan tanto en la vertiente de supervisión de terapeutas y facilitación de grupos, como la de Terapeuta en intervención clínica con parejas y familias, así como en el tratamiento clínico de adolescentes y adultos. Su extensa experiencia le permite actuar con precisión como Mediador en crisis familiares o en procesos de separación y divorcio.
Como persona comprometida con su profesión, insiste en la mejora continua como herramienta para ofrecer una atención de Calidad.