TRASTORNOS DE ANSIEDAD EN LA ADOLESCENCIA

LA ANSIEDAD EN LA ADOLESCENCIA

La ansiedad es uno de los problemas que más se observan al trabajar con adolescentes en consulta. Muchos de ellos ya empiezan con problemas de ansiedad en la infancia y otros surgen durante la etapa adolescente. 

En la adolescencia, la ansiedad se presenta de forma similar a la ansiedad en adultos (hablamos detalladamente sobre ansiedad en adultos aquí [insertar enlace de la pastilla de adultos sobre “Ansiedad, angustia, crisis de pánico y trastornos de ansiedad”]). Sin embargo, los adolescentes con ansiedad suelen mostrar algunas particularidades. Sus síntomas incluyen con más frecuencia la irritabilidad, la ira, la agresividad, el aislamiento social o la inseguridad. 

¿Cómo detectar la ansiedad en los adolescentes?

No hay un patrón único de manifestación de ansiedad en adolescentes, si no que puede presentarse de diferentes formas. Además, en adolescentes puede ser más difícil identificar problemas de ansiedad, ya que tienen tendencia a ocultar sus pensamientos y sentimientos. Sin embargo, si detectamos alguno de los siguientes signos debemos estar atentos, puesto que podrían indicar que un adolescente está sufriendo ansiedad y necesita ayuda:

• Se preocupa en exceso sobre situaciones cotidianas
• Evita situaciones que le resultan complicadas o le generan inseguridad
• Irritabilidad y/o agresividad
• Dificultades de concentración (que anteriormente no presentaba)
• Es altamente sensible a las críticas y se autoobserva en exceso
• Se aísla y evita participar en situaciones sociales
• Se queja frecuentemente de dolor de cabeza o estómago
• El rendimiento académico baja o rechaza ir a clase 
• Busca continuamente que otros le calmen o aseguren que todo está bien
• Presenta dificultades para dormir
• Consumo de sustancias excesivo
• Se autolesiona haciéndose cortes superficiales, moretones, golpes, etc.

Muchos de estos síntomas también se dan en los adolescentes que tienen depresión. Además, ansiedad y depresión suelen darse a la vez en muchos casos.

Causas de la ansiedad en adolescentes

En el desarrollo de un problema de ansiedad pueden influir diferentes factores, tales como una predisposición genética, patrones de personalidad, variables hormonales y problemas sociales, familiares o globales. Sin embargo, podemos identificar los factores que los adolescentes suelen mencionar con mayor frecuencia en consulta como provocadores de ansiedad:

• Mayores demandas académicas.
• Autoexigencia y presión por conseguir el éxito.
• Necesidad de aceptación por el grupo de iguales.
• Miedo a hacer el ridículo, vergüenza e inseguridad desenvolviéndose en lo social.
• Excesiva influencia de las redes sociales en sus modelos de imagen, de comportamiento, idea de éxito, etc. 
• Inseguridad ante el futuro.

¿Cómo se diagnostican y tratan los trastornos de ansiedad en los adolescentes? 

Cuando se solicita atención psicológica para un adolescente del que se sospecha que pueda presentar problemas de ansiedad, lo primero es realizar una evaluación. Generalmente, el o la terapeuta se entrevistará con el adolescente y (en la mayoría de los casos) también con sus padres para llevar a cabo un análisis del problema. Es posible que también emplee algunas pruebas estandarizadas como test y cuestionarios para ampliar la evaluación. 

Después de algunas sesiones de evaluación, el terapeuta expone el análisis del caso al adolescente y a sus padres, emitiendo un diagnóstico si así se requiere y orientando sobre el tratamiento más indicado para ese caso concreto. 

Cada tratamiento debe estar adaptado a la persona y circunstancias que presenta. Sin embargo, el tratamiento de los problemas de ansiedad en adolescentes suele incluir un trabajo psicoeducativo, donde se enseña al paciente a reconocer y entender sus síntomas de ansiedad, cómo se originan y cómo gestionarlos. Así como estrategias de afrontamiento gradual de las situaciones que generan ansiedad o inseguridad, fortalecimiento de la autoestima y cambio de creencias limitantes por creencias útiles. 

Además, se dan pautas a los padres u otros familiares para que puedan apoyar al adolescente durante su terapia de forma óptima.

¿Cómo afecta la ansiedad en la vida escolar y social de los adolescentes? 

En muchas ocasiones la vida académica y social de los adolescentes con ansiedad se verá afectada. Las formas en las que esto ocurre son diversas:

• Evitan ir a clase por miedo a sufrir una crisis de ansiedad allí y no poder ser atendidos eficazmente o por vergüenza y miedo a la incomprensión de los demás.
• Evitan ir a clase por ansiedad social, temiendo convertirse en el centro de atención, o tener que hablar en público, ser objeto de burla o no saber desenvolverse con sus compañeros y/o profesores.
• La elevada autoexigencia y presión por sacar buenas notas hace que estén constantemente con tensión y ansiedad, pensamientos negativos sobre sí mismos y sobre cómo resultarán los exámenes y trabajos que tenga que hacer. Se pueden exceder en el estudio, ser perfeccionistas, no dejarse tiempo necesario para descansar y hacer otras actividades, o llegar a procrastinar el trabajo por pensar que es demasiado o que no pueden.
• Pueden aislarse y evitar asistir a reuniones sociales por miedo a no encajar, conocer gente nueva y sentirse juzgados, no caer bien, hacer algo ridículo, sufrir una crisis de ansiedad y no poder ser atendidos eficazmente o que los demás no les comprendan y les valoren negativamente.

¿Qué terapias están disponibles para tratar los trastornos de ansiedad en los adolescentes? 

Para el tratamiento de la ansiedad en adolescentes existen diversas metodologías terapéuticas. El profesional a cargo del tratamiento informará de la más recomendada para cada caso y cómo se realiza. Entre las principales opciones terapéuticas para ansiedad en adolescentes se encuentran la Terapia Cognitivo Conductual, la Terapia de Aceptación y Compromiso y la Terapia EMDR (para procesamiento de memorias traumáticas). Además, en los casos en que sea necesario se puede recurrir a farmacoterapia.

¿Cómo se puede prevenir la ansiedad en los adolescentes? 

Para prevenir la aparición de problemas de ansiedad en los adolescentes podemos tener en cuenta los siguientes consejos:

• Mantener una buena comunicación. Que el adolescente cuente con personas de confianza con quienes puedan hablar de sus preocupaciones y ayudarles a gestionarlas.
• Hábitos saludables de descanso, comidas, ejercicio.
• Saber hacer un uso adecuado de las nuevas tecnologías, no caer en adicciones tecnológicas.
• Cuidar y fomentar las relaciones de amistad.
• No estar expuestos a un ambiente gobernado por la crítica excesiva y la exigencia desmesurada.
• Leer, informarse y desarrollar competencias básicas de gestión emocional.

¿Cómo pueden los adolescentes manejar sus propios síntomas de ansiedad? 

Para que un adolescente pueda manejar su ansiedad es necesario que aprenda sobre sus causas, síntomas, manifestaciones, etc. Una vez comprenda lo que le pasa y por qué, podrá identificar sus sentimientos y pensamientos, será capaz de expresarlos y poner en práctica algunas herramientas útiles, como la relajación, la meditación, estrategias asertivas de relación con otros, estrategias de afrontamiento, cambio de creencias limitantes por otras más útiles, abandono de conductas de seguridad y evitación, etc. 

TRASTORNO DE ANSIEDAD SOCIAL (FOBIA SOCIAL): MÁS ALLÁ DE LA SIMPLE TIMIDEZ

Imagen de Freepik

La ansiedad social se refiere a los sentimientos de ansiedad y temor que ocurren en respuesta a situaciones sociales. Aunque es natural sentir nerviosismo antes de una presentación, o al estar con gente que no conocemos, en la ansiedad social esta angustia puede ser tan abrumadora que resulta difícil de sobrellevar. A menudo, esa ansiedad se experimenta con solo pensar en la situación o al recordar algo que ocurrió en el pasado.  Esta condición también es conocida como «fobia social». 

La ansiedad social puede ser específica, si sólo ocurre en algunas situaciones, como hablar en público, o generalizada, si afecta a múltiples situaciones sociales. La gente con ansiedad social suele temer, entre otras, las siguientes situaciones: 

• Ser el centro de atención 
• Conocer gente nueva 
• Hablar con personas de autoridad 
• Hacer presentaciones y hablar ante un público 
• Fiestas y eventos sociales 
• Ser observado mientras haces algo, como firmar un documento, comer o beber 
• Relacionarse con gente de un determinado género o edad
• Ligar
• Etc.

Los pensamientos ansiosos en estas situaciones tienen que ver con mostrar comportamientos o síntomas de ansiedad que les hagan sentirse juzgados o evaluados negativamente por los demás, experimentar vergüenza, humillación o rechazo u ofender a otros sin intención. Por ello, suelen evitar las situaciones sociales, o permanecer en ellas con alta ansiedad.

¿Cuáles son las diferencias entre la ansiedad y la depresión en los adolescentes? 

Aunque la ansiedad y la depresión en los adolescentes tienen manifestaciones muy similares y pueden darse ambos problemas a la vez, no son iguales. Mientras que en la ansiedad debe existir un temor acusado a que ocurra algo malo, con síntomas como inquietud, tensión, agitación y manifestaciones de activación física (palpitaciones, sudoración, calor, dificultad para respirar, etc.), en la depresión, los síntomas tienen más que ver con una desactivación nerviosa (agotamiento, falta de energía, desgana, incapacidad para disfrutar en situaciones placenteras, desmotivación, tristeza). 

En ambos casos se produce una disminución de las actividades que solía hacer la persona, pero los motivos son diferentes. En la ansiedad, la persona evita situaciones y actividades en las que cree que puede ocurrir algo que teme, mientras que en la depresión se abandonan actividades por falta de energía o porque las expectativas de disfrutar o de sacar rendimiento positivo de esa acción son muy bajas.